Veraldine abre los ojos de manera abrupta, un sudor frío recorre su rostro, mira de lado a lado verificando que se encuentra en su habitación. <<No ha ocurrido nada…>>, pronuncia para si. La misma pesadilla que la ha atormentado desde que su memoria le permite recordar; una pesadilla que la remonta a los viejos bosques del planeta Adnalia, repleta de misterio, sombras y dolor. Con poco ánimo, se levanta de la cama para iniciar la monotonía que conforma su rutina de cada día.
Tras la puerta, su hermano menor Cedric, aguarda con un poco de comida que preparó en la arcaica estufa que posee su cabaña. Necesitarán energía para poder completar las labores diarias en el sembradío.
Lo mejor ocurre cuando no lo esperas…
Al escuchar la alarma, ambos salen presurosos para encontrarse con las inmensas máquinas que avanzan desde Continental, la gran capital humana, situada a varios kilómetros de su aldea. De ellas descienden un contingente de soldados que pasa lista de lo habitantes, entregándoles los contenedores que deberán llenar si es que desean recibir el alimento diario.
Motivados por un anhelo, los hermanos intentan llenarse de energía para poder recibir más allá de la comida que los humanos les otorgan; una pequeña cifra monetaria que podría hacer sus vidas menos miserables, al menos, por un efímero instante.
Lo que ambos desconocen es que ese deseo latente en sus corazones los llevará a conocer a un individuo singular, Adam Cromwell. Un recién nombrado coronel del ejército central, asignado a la región para garantizar el cumplimiento de las leyes que exige su estado. El destino suele ser caprichoso, temperamental, impulsivo y peligroso.
¿Estamos sujetos a acatar las fuerzas del destino? Habrá que averiguarlo…
Sin esperarlo, incluso sin desearlo, los caminos de Vera y Adam se entrelazarán de forma tempestuosa, un amor prohibido surgirá entre los dos, llevándolos a una implacable lucha por defenderlo y preservarlo. De igual forma, conducirá a la joven pelirroja a descubrir una mítica reliquia, un artefacto poderoso y tan antiguo como el tiempo mismo.
Vera deberá develar los misterios de aquel vestigio para concretar la misión de una fuerza cósmica; una energía que escapa de toda comprensión humana, aun a pesar de su increíble tecnología y avance científico, continúan sin poder explicar desde que el primer hombre piso la faz de aquel místico planeta, aquellas complejas situaciones que solo pueden ser explicadas con una palabra mundana, “magia”.
A pesar del cariño, las intenciones del coronel ocultan diversos misterios, su interés en Veraldine se incrementará al descubrir que ella posee una habilidad única, un conocimiento que los humanos prohibieron entre los elfos desde hace siglos, la comprensión de su idioma original, el Adhaliom…
Sabedor de que aquello puede contribuir enormemente al esfuerzo que él y sus camaradas han realizado durante años, les concederá a Veraldine y a su hermano la oportunidad de ingresar a la magnífica ciudad humana, proporcionándoles una nueva vida, mucho más maravillosa de lo que ellos jamás pudieron siquiera imaginar.
Nada será sencillo…
La pasión aumentará entre ambos y con ello, la indecisión del coronel, ¿logrará ser más fuerte su amor? O, ¿acaso podrá más su ambición personal?, con ello nace otra incógnita, ¿debería confiarle a Vera sus secretos? ¿Ella vería con buenos ojos sus intenciones o se opondría rotundamente?
El tiempo no siempre es un aliado…
Mientras ellos se pierden en su romance, viviendo momentos de ensueño, la adversidad se manifestará de diferentes formas. Los dirigentes de los Inquisidores, la segunda fuerza militar humana que rige el planeta y, cuyo único propósito es dar caza a todos los “no humanos” que se opongan al régimen, persiguen el mismo objetivo que el joven coronel.
La carrera por la supremacía ha iniciado, el choque de ambos bandos traerá grandes repercusiones políticas y sociales que deberán ser anticipadas por nuestros protagonistas, de lo contrario, su camino estará plagado de infortunios y desgracias. ¿Podrán lograrlo?
El mal puede adquirir muchas facetas…