Luchar por un sueño…

Para mantener una dinámica dual, el post de esta semana es sobre los sueños en lugar de una reseña literaria; aunque, les puedo anticipar que ya me encuentro trabajando en la siguiente y estará disponible el próximo domingo (lunes en la madrugada), no se la pueden perder, es una novela sumamente emotiva.

¿Por qué decidí hablar sobre los sueños? Bueno, toda mi vida tuve (y sigo teniendo) un sinfín de sueños, mas no siempre, la motivación adecuada o el apoyo para luchar por ellos.

Los sueños son parte fundamental de nuestra existencia, por eso, siempre debemos perseguirlos.

Pero, ¿Qué ocurre cuando ese sueño se ve imposible, tan lejano que nos rendimos antes de intentarlo? A todos nos ha ocurrido, en mayor o menor medida, lo que ocurre es que tenemos miedo, con dos posibles vertientes, tenemos miedo al fracaso o tenemos miedo al éxito. Podemos identificar que somos presas de ese miedo cuando comenzamos a anteponer excusas para postergar dicho sueño, frases como:

  • No tengo tiempo porque estoy muy ocupado.
  • No puedo porque no tengo dinero.
  • El próximo año lo intentaré.
  • Ya estoy demasiado grande para intentarlo.

¿Han pensado alguna de estas frases? Seguro que sí, ¿Cómo podemos quitarnos ese miedo? Francamente, no creo que exista forma alguna de hacer eso, el miedo no desaparece jamás, es una fuerza natural de nosotros hacia lo desconocido. Luchar en contra de ese miedo por lo general, tampoco funciona. Lo único que podemos hacer es aceptarlo y seguir adelante, sabiendo que el miedo esta ahí, que no va a desaparecer, pero, que tampoco nos va a detener.

Sin importar que es lo que deseen lograr, deben internarlo, poner tu alma y tu vida en ello sin pensar si fracasarás, seguramente lo harás, en los primeros intentos todos fracasamos, pero, cómo hubiera dicho el dramaturgo Inglés Samuel Barclay Beckett:

“Lo intentaste, fracasaste, no importa. Inténtalo de nuevo, fracasa de nuevo, fracasa mejor”

Todo es posible, quieres escribir un libro, no lo digas, toma el papel, una computadora, celular, lo que desees; abre un programa de texto y escribe, escribe en las mañanas, antes de dormir, en quince minutos que tengas libres al día, en la hora del almuerzo. Momentos habrá para que lo hagas, lo ideal sería que te marcarás un horario fijo, comenzando pocos minutos al día para crear un hábito.

Lo que deseas es empezar un negocio, entonces valida las opciones, tus costos y beneficios, ¿Puedes empezar solo o debes formar un equipo? Hazlo, acércate con tus amigos y comienza, aterriza tus ideas, genera un plan de negocio, comienza el estudio de mercado, ¡Hazlo! Coloca el primer ladrillo de la obra que deseas construir.

Todo es posible, sin importar cual sea tu sueño debes intentarlo, no puedes permitir que se desvanezca antes de empezar. Al final del camino nos arrepentiremos más de lo que no hicimos que de lo que hicimos. Nunca es tarde para comenzar.

Muchos a tu alrededor darán comentarios en contra, otros te ignorarán, dirán que estas mal de la cabeza; no los escuches, escucha solo a tu voz interior y a las personas que en verdad te apoyen, que sumen en tus planes y no resten. Un consejo que puedo dar es que, sea cual sea tu proyecto, procura divulgarlo lo menos posible, al menos hasta que hayas alcanzado un progreso considerable.

Ocurre algo hasta cierto punto gracioso con algunas personas, cuando nos ven que intentamos algo nos juzgarán, nos criticarán y dirán que no podremos lograrlo; cuando vean que estas convencido de lograr lo que te propones y que has empezado, entonces te dirán como es que debes hacerlo, cuando por fin lo hayas logrado, dirán que sabían que lo lograrías y que siempre creyeron en ti.

No me malentiendan, es bueno escuchar consejos, pero siempre va a ser más importante escucharnos a nosotros mismos.

Debemos moldear ese sueño y convertirlo en una meta, en un objetivo que está al alcance de nuestra perseverancia.

Jamás se den por vencidos, caer es permitido, pero, levantarse, eso siempre será obligatorio, vida solo existe una en este tiempo y es fugaz, como un suspiro, un parpadeo; luchen por sus sueños. 

Gracias por haber leído, espero les haya gustado este post, cómo la semana pasada, los exhorto a que jamás se rindan, los sueños son posibles para todos aquellos que perseveran por alcanzarlos.

No olviden comentar, compartir y suscribirse a la página.

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*